Cuando me siento a contemplar el mar,
siento la máxima expansión de espiritu y de color,
es una alusinación,
me entrego al folcklor, al folcklore, al folcklore mentalem.
Nos vamos en un avión hacia el desierto,
despacio, lento,
tratando de cooperar con aquel chabón que un día me dijo
que tenía que teñirme el pelo de rojo intenso,
rojo llamistico de fuego y pasión,
de sensación y vibración labial territorial,
así como aquellas chicas que andan acostumbradas
a volver con lo tóxico elemental,
es una contradicción,
el desapego causa dolor y causa frustración,
pero calmadas encontramos la sanación,
es lo que hay hoy,
y luego de una breve canción
me meto un chapuzónonon,
que purifique tu alma, tus sentidos,
y te lleve a la maxima vibración.
unasllamas
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