Cuando tu voz reverberó entre las olas,
cuando tu mirar se enterneció de cosquillas,
cuando las almas, juntas, en los días,
cuando ahora, vives tus alegrías,
cantas, como sueñas,
divinas melodías.
Cuando tu voz reverberó entre las olas,
cuando tu mirar se enterneció de cosquillas,
cuando las almas, juntas, en los días,
cuando ahora, vives tus alegrías,
cantas, como sueñas,
divinas melodías.
Fluorescente alegría del hogar
belleza
de aromas ávidos
de amor
que todo lo perfuma.
Nada más precioso que esta sensación,
fundirme con un bosque estrellado de pequeñas palabras
como llaves de puertas infinitas.
Noche de frescura azulada
llévame por tu silencio sideral
ayúdame a jugar con el tiempo
a conocerlo en la rotación de su cielo floreado.
Noche de profundo misterio,
tan fugaz, tan eterno.