Crónica del fuego

(Somos polvo de estrellas, luz del sol y mierda de gusanos. Ah, y también pendemos de un hilo invisible y fragil)

Un día me desperté por la mañana y mi casa se prendía fuego.
Un día me desperté por la mañana y escuché que gritaban mi nombre,
me pedían ayuda.
Un día me desperté por la mañana y no pude discernir si seguía soñando o estaba en la realidad.
Dos gatas haciendo de bomberas y una cortina ardiendo en llamas.
Gritos y desesperación, una tormenta repleta de rayos cósmicos.
Pude ver la madera desaparecer y transformarse en cenisas,
eso en que nos vamos a convertir todas y todos.
Un día desperté por la mañana y el cielo rosado,
se fundía entre nubes grises.
El agua apagaba el fuego y vos y yo agradeciamos la vida.
Un tercer ojo con intención de magia, se abría para no cerrarse nunca más.
Y, por la puerta de atrás, se veía un mono riendose a carcajadas.

(unallamaincendiada)

y....

Casas de espejos, casas de ropa, casas de zapatos, casas de trago, casas casas, casas de toallones, casas de comida, casas de artefactos; lugares inhabitados colmados de luz y de colores. todo llamando detrás de una vidriera impecabilisima que pronto estallará en pedazos.

<<LA CIUDAD LEVANTA VUELO EN UNA AGONIA SIN LIMITES>>

(unamale)

esencial-existencial!

estoy despertando de un sueño. No, no estoy despertando, estoy recordando. Siempre estuve despierta, todo en esta vida fue pura consciencia y continuidad de la consciencia, solo que mi vida fue en pasado y solo en este momento puedo asirla, visualizarla tras ese manto translúcido que actúa de filtro ; la memoria. Recordarla catalogando las épocas, las edades, los sentimientos, la temperatura del cuerpo. Puedo hacerlo desde una seda de gusanos. Puedo analizar, catalogar, ordenar. Ahora puedo verme, como si estuviera soñando.

(unamale)

Cosmicamente perfecto

Encuentros en los que me veo
en frases y mini-libretas
saber esperar es saber todo,
no existe el azar
todo sucede en un tiempo
creado por la mente
que asciende y desciende,
me auto supero para no ser una idiota más,
que mira en el otro lo que no puede resolver en si,
y cuanto esfuerzo nos cuesta,
horas de inutiles pensamientos
que en instantes de luz y amor
cambian de forma y color.
No es que todos somos iguales,
hay miles de blancos y modos de verlos.
En eso hay un interesante secreto:
aprender a convivir con la diversidad y amarla.

(unaNaTi)