jueves, 17 de noviembre de 2016

ENTROPIA

Miraba, bajo el sol matutino,
en la calle de árboles verdes en movimiento,
cada hoja brillando en mi mente,
mente demente delante mío.

Dónde quedó ese equilibrio femenino -masculino?
Veo un loco tocándose, fuera de sí,
cruzo la calle, tengo miedo, es temprano
y todo empieza  a asustarme.

Traer niñxs a este planeta?
Escapar a un recondito lugar, natural, pero
estamos acá y ahora,
y en miles de dimensiones, a la vez.

Dinosaurios, entre nosotrxs, llegaron ya.
13 gatos tenía su mamá,
impuestos de fé.

Hay paz, más allá de esa violencia que te creaste,
hay una chicas sentadas a la salida del Patio Olmos,
meditando, ríendo, pidiendo por más conexión real,
mirándonos a los ojos por más de un minuto.
Era ella, eramos nosotrxs, mirándola.
Mensaje de paz, belleza exhuberante,
en medio del fango.

Cristoween y Dios, palabras, palabras,
ciclos en evolución, synchronotron.

Trabajar cansa pero despierta,
ser un superhéroe, aunque seas autista.
Conexiones entre números, el 3.
La sincronía de lo telepático,
el amor, los libros, la tristeza, no tiene fin,
la felicidad, si.
Es un derecho de nacimiento, el motor de nuestro movimiento.

Vidas dificiles, vidas fáciles, transitar lo triste,
todo va pasando, mientras disfruto de la búsqueda.